«eran tantas las embaxadas que le fazian las requestas y pedimentos de vistas: los ruegos de·le tener por amigo que los mas de·los cristianos principes no pararon fasta se ver con·el: el papa mismo que fue Gregorio el dezeno en aquel ayuntamiento que en Francia fizo en Leon so el Royne: por sola codicia de conoçer vn tal principe y tan bien porque sin el no pensaua poder fazer cosa grande ni esperaua poder bien»