«luego leen las historias de·los romanos mas por ser tan dulçe su stilo: que por sentir sus cruezas. A·la contra de·la nuestra: que muchos dexan de ver la por la rudez y desabrimiento de su fabla: vence luego nuestra catholica historia: vence no solo la historia romana que mas por lo ageno que por lo suyo se lee: a·la contra de·la nuestra: mas vence su mismo desatauio y rudez»