«de acuerdo que renunciassen todos los tres y el que renunciar no quisiesse que le dexassen a solas y le quitassen la obediencia los suyos fasta que consintiesse o quedasse tan a escuras y tan sin anparo y abrigo que no fallasse ni quien le mirasse ni obedeçiesse: y echada la discordia fuera que se ayuntassen todos los christianos o los procuradores bastantes de aquellos y que escogiessen todos de consuno o algunos por todo el ayuntamiento de voluntad y»