«delante del despendedor son menos que non aquellos que van delante del avariçioso. Ca todas las virtudes confinan delante e detras a los sus viçios contrarios. Lo segundo si es que el ome gastador es mas prouechoso a todo onbre que non el onbre avariçioso. Lo terçero si es que el onbre gastador biue mas contento que non faze el avariçioso. De·la degastaçion desçiende la pobredat; segun demuestra Aristotiles alli donde dize: quien despiende»