«las marauillas de Dios: y tendio los sanctos corporales y mostro las diuinas formas todas bueltas en sangre. Fue tanta la gloria que todos entonce sintieron en ver tan presente aquel dios y hombre que tan largamente por los hombres su preciosissima sangre hauia derramado que se les figuro que le vehian tan puesto en la cruz y corriendo todo sangre como quando en aquella por nos padecio: siguio·se vn llanto en·la gente deuota tan dulce»