«donde tu estas, e ha onrado la gente, que asy son onbres como tu. Dize el sabio: no te cures de loar ningun honbre, fasta que le ayas prouado; sy no series tal como el huerfago, que quema a sy mesmo por seruir a otro. Asy soys vosotros como ponçemer, que es todo bueno: fruto, e flor, e madero, e foja. Aquel es sabio, e bueno»