«sus grandes yerros con que la gente bruta engaño fueron aquestas y semejantes que de tan mala y venenosa fuente nacieron: y ende poco me quiero tener por que los carnales no cojan veneno de tales palabras cuya natura es inclinada en malos desseos dende el principio de adolescencia. Facilmente puedo yo reprobar esta falsedad no solo ahun por theologia mas por moral philosophia: como lo scriue Aristotiles principe de los perypatheticos en·el primero y decimo libros»