«marauillaua de su alteza que en tan poco tenia o mostraua tener lo que el emperador tan encareçidamente le auia encomendado: reconocio la emperadriz lo que el mayordomo dezia ser mucho verdad y deuer se mirar y reuoco lo que inconsideradamente hauia otorgado al infante su fijo: y dixo le que no se enojasse que por obedecer al emperador su señor y marido cumplia que assi se fiziesse: ca mas era obligada a guardar y cumplir lo que»