«la cibdad. E como estuviesse el Ysopo en su lauor cauando en·el canpo allego se a·el vn sacerdote llamado Ysidis: el qual andaua errado del camino e rogo al Ysopo que le enseñasse por qual camino podria yr para la cibdad. El Ysopo como aquel que era muy piadoso: tomo lo por la mano e fizo assentar al sacerdote de baxo de vna sombra de figuera: e dio le pan e azetunas e figos»