«que le dixo que asomauan los moros y que todos los çerros estauan llenos de tanta morisma que mas caber no podian: venian dizque escaramuçando y dando vozes y alaridos y fablando en su algarauia a·los quales el rey magnanimo embio luego a dezir por vn su official de armas que sabia del arauigo que les mandaua que le esperassen que luego salrria para ellos a les dar la batalla: respondieron ellos a vozes que no venian por»