«al conde ya mucho mas cargando le la mano y afeando·le de fementido: ca no le guardaua la fe ni el pleyto y homenage que le tenia prestado: el conde ni por esso dexaua de fazer todo el mal que podia: el rey entonce por justificar mas su causa delibero de recurrir al sancto padre: y quexar·se ante su sanctidad: y para esto embio·le vna solempne y magnifica enbaxada: fueron los embaxadores»