«mal e dapño. Como vieron los de aquel lugar esto sentiendo se muchos en especial del estrago que fazia en·los ombres: rogaron al lobo que les segurasse las vidas. Entonces respondio el mansamente diziendo que no faria mal a ninguno que le aya apaleado o ferido con piedra: o le fizo: o le quiso fazer otro qualquier mal: e menos a los que le dieron el pan: e ovieron misericordia d·el:»