«infinidas iornadas en vuestra busca aquella muy buscada y sin razon de hallar se. O si en cosas de amor ouiesse iuez y yo fuesse vno yo creo que assi catiuo como aquella de vos catiuada hos iuzgasse: y maldicha mi vida porque no hay quien en tal caso me diesse la libertad que desechays. Y como consentis que yo diga ser menester terçero para que recibays merçedes: tales cosas veo en vos que no se de»