«cercaron me los dolores de·la muerte: no temporal, mas perpetua. E los peligros del infierno me fallaron. Bien dize cercaron: porque es abismo: e su vestido es como cubierta. Ca vistio·se la maldicion como ropa: e entro en sus partes de·dentro como agua, e como azeyte en sus huessos: e sera le fecho como vestidura con que se cubre: e como cinta, con que de continuo»