«de los tantos que mataron: bueltos con tan alegre vencimiento y triunfo al lugar donde partieron preguntaron por su capellan y quisieran comunicar siquier por dar gracias a Dios nuestro señor por la tan sobrada victoria que hauian alcançado: mas el sacerdote les dixo que no podia ser que las sanctissimas formas el las hauia escondido en cierto secreto lugar y enbuelto en los corporales: y esto porque si vencidos los cristianos fueran no viniessen a manos de·»