«reconoçidas las vrgentes y tan justas causas porque a ello se mouiera: pareçio le a papa Gregorio septimo que tenia la silla entonçe de Roma que fuera justamente el preuilegio otorgado y que mereçia el tan catholico rey essa y mayores cosas: y assi mando a·los prelados d·estos reynos que se dexassen de porfiar çerca d·ello: si·no que el procederia contra ellos con el rigor que se requeria: callaron entonçe sus prelados y»