«muy grauemente de vna gran bofetada que vna donzella resplandeciente y fermosa me dio en·este punto: y no entiendo poder escapar tan lastimado perdido y tan malo me siento: y subito le recreçieron calenturas mortales. Vinieron los medicos y juzgaron las fiebres ser muy peligrosas. Mando llamar los padres de confession y teniendo por dicho que fuesse diuina vengança y que fuesse la donzella la misma sancta Tecla en cuyo patrimonio que es la yglesia de»