«derramaras con l·agua del mal grado sobre tus enamoradas llamas por que des fin con aquella a·lo que dio prinçjpio la buena sperança: mas que sea el enamorado tuyo colerico sanguino que saben de ser amados y mucho meior amar: que el que sabe y entiende la cosa entendiendo la la hama, y amando·la la stima, y stimando la la·guarda y syerue, y el grosero por el contrarjo. La sisena cosa»