«si agora mis affanes encareciesse y seruicios despendidos quexasse al fin Fortuna que siempre tuue enemiga daria muy vergonçozo fin a mi proposito: do mas mi pena mostrasse: y do el effecto fuesse ninguno gran culpa y pequenyo gualardon mereceria: y por esto me plaze complir mis trebaiosas iornadas: porque depues si ventura me ayudare que vuestro seruicio se cumple podre hauer loores de mis obras. Assi que dexadas todas estas cosas para en aquella hora»