«de gualardon: y hasta aqui hun cuydado de cobrar a hun Pamphilo tenia: y agora con dos me veo: vno aquell y otro en seruicio de·la tan valerosa dama feneçer mis dias: mas como muy mas miserable sea que otra ninguna mujer las fuerças pequenyas y el desmedido desseo en vno me dan la guerra. Pues yo no se como con iusta razon de tal persona seays quexoso: que segund su gran virtud recibo»