«la vida e la oraçion te plugo. El vulto del qual con el animo ante ti trayente. Aquel siempre a ti demuestra o guardador o exemplo. Digo es necessario d·alguno al qual las costumbres de nosotros si mismas se leuanten. Si no a regla las cosas prauas no corregiras. § Do quiera que me vueluo argumentos de·la mi veiez veo. Viniera en mi suburbano e quexaua me de·las despesas del mi edifiçio cayente»