«los tales an d·esta guisa bien prouado e continuado. Siquiera perseuerado las giganticas tentaçiones non las podrian desuiar nin quitar dende. E quando mas fazer non pueden la rodilla del cuerpo le faran fincar por las leyes de mortalidat syn enbargar o destoruar el bienauenturado offiçio de sostener las çelestiales obras. E la ficçion ante puesta sobre cuya ordimbre esta alegorica moral es texida fue sin estoria alguna por otras maneras cuya virtud e verdat sustançial mente»