«pero al fin aquella pereçoza de muerte no se scusa: y pues que es mia y mis merecimientos lo han ganado no lo me quiteys: que si bien conociessedes quantos tormentos me dan los vuestros diriades que la muerte no me es pena en conparacion de·lo que siento por la vuestra: mayormente conociendo tener yo la culpa: y que vos padezcays la pena esto me es incomportable passion: y que yo quiera dezir qual»