«nos oys de vuestra conpasion afligidos doliendo·nos de ver·os desesperadamente morir, por quitar·os de tan manifiesto peligro se haze, y es bien que lo que podemos si no lo sabeys que lo sepays porque de vuestra muerte mucho nos dolemos, y pues que ya no como a enemigos mas como a señores y hermanos y nuestros amigos soys aconsejados de lo verdadero y de vuestro cierto peligro se conosçe, si por ventura lo sano»