«a·esta religiosa con cara alegre e honrradamente: teniendo se por muy contenta en ser visitada d·ella: porque era reputada e avida por persona de buena e religiosa vida. Ellas fablando entre si: vio aquella casta muger como lloraua aquella perrilla: e pregunta de·la causa de su lloro. La vieja aguzando sus engaños le dize. O amiga muy amada non quieras renouar mis dolores: faziendo me contar la causa de·las»