«naçen los escandalos recrecen las malicias y siguen los grandes inconuinientes. Y assi leemos que el rey don Rodrigo estando folgando en su corte se enamoro de·la fija del conde don Julian y acometio aquel crimen desonesto de que naçio el perdimiento de España: fasta el rey Dauid solazando en su corte cayo en adulterio y homicidio aleuoso: y assi los floxos y muelles infantes gozando de·la negra folgança estropeçaron en aquella tan ponçoñosa infamia de»