«desataron lo: el qual con grandes sospiros e quexas començo de preguntar al camarero: por que tan cruelmente lo avia fecho ferir. Fue le por el respondido que por su grand bien lo avia mandado: por quanto Nedio su discipulo le avia enformado como algunas vezes se enloquecia e le tomaua frenesia: de manera que si non lo atauan e castigauan: non cessaria de fazer mal: e ferir a·los que eran presentes:»