«espera con prudencia el caso de tu vida: ca tu reloie pocos grados ha de passar. Ca toda hora passa muchos grados: e luego que viniere al fin: cahe subitamente en·el abismo de·la muerte. Oye lo que dize el poeta. La vida breue como vna sombra ligera fuye, e se apoquece: e torna a ser nada. E assi va subitamente: e cahe quando pensamos que sta mas firme:»