«de su muerte: que la possean tantos herejes y tantos moros ya de .cc. y cerca .ccc. años tomada fasta nuestro tiempo. No solo deue llorar el christiano empero con mucha deuocion deue orar a Dios que buelua sus ojos de misericordia sobre tantos males: y de·la lumbre del sancto suyo sobre nos que veamos lumbre que merced nos haya quiera leuantar la perfida gente de·la tierra sancta porque tenida de sus fieles en ella siempre»