«omne lo toma en·los dedos desfaze·se como farina jmpalpable e en el gusto es agudo como salitre e rasca la lengua. Pero sy lo lançan en el fuego non arde como salitre antes esta como tierra muerta e huele mal su socarradura. Esto muestra que la complexion de·las partes aridas lançan fuera su humidat e la agena generando en la sobrefaz aquella salsedunbre preuiniente de indigestion. Ca las cosas digestas dulçes son como testigua Aristotil»