«de sus parientes y debdos de Francia que tan mal respondian a·lo que tenian ofrecido. Llego el principe su fijo cargado de joyas y dones que del rey de Siçilia don Fadrique tomara: y riendo se dixo al padre. Dad señor gracias a Dios porque tan nobles enemigos nuestro Señor nos ha dado que si fueran mucho amigos no podieran tanto amar nos ni de tanta nobleza vsar con nosotros como agora lo fazen: todos estos»