«la memoria de·la muerte, trahe al hombre a fazer penitencia. Por·ende se lee de vn maluado cauallero: que no quiso acceptar penitencia alguna de·las que el papa Alexandro le dio. E en fin el papa le dio vna sortija para que la leuasse por penitencia: e quandoquier que la mirasse, que pensasse en su muerte. Despues de·lo qual hauer fecho muchos dias: torno al papa: e dixo·le»