«y a don Ramon de Perellos. El rey es contento y el destroque se faze: despierta·se otro partido para el seruicio del magnanimo rey: que el alcayde de·la ysla de Iscla que es muy fuerte y mucho cumplidera para mayor seguridad del estado del rey offreçe de entregar la ysla y todas sus fortalezas al rey: y a esto se mouia el alcayde por enemiga mortal que tenia con·el gran senescal y sus deudos: acepta»