le alguna verguença de sus delictos: y aquesto hizo muy bien el piadoso | Jesu | quando dixo. en verdad os digo que vno de vosotros me ha de

le vendiesse por su maestro, como scriue Jeronimo. Boluio·se entonces el piadoso | Jesu | y dixo·le: tu dixisti. quasi quisiendo dezir, por tu propia confession has manifestado

de toda gracia. Onde Jeronimo, aqueste postrimer recuerdo nos ha dexado nuestro maestro | Jesu | : como suele hazer el que se destierra luengo camino, que al que mucho

a·la memoria continua de·la passion sacratissima de nuestro redemptor y maestro | Jesu | .§ Si la vida de qualquier deuoto christiano que viue so la regla del

fablamos de voluntaria pobreza: quien se hallo nunca mas pobre que nuestro maestro | Jesu | , colgado desnudo en·la cruz? Donde ahun no tuuo donde reclinar su cabeça?

y mueua a contemplar los tormentos y muerte de nuestro saluador y maestro | Jesu | . E allende de aquesto seruiran las sesenta cinco oraciones, que qualquier catholico christiano

scriuir los diuinos misterios de·la passion sacratissima de su maestro y nuestro | Jhesu | , en·la forma siguiente.§ Saliendo el misericordioso Jhesu allende el torrente Cedron: llego

punto pues, o deuotos christianos de·la sagrada passion es, que nuestro maestro | Jhesu | por nuestra redempcion y salud, començo de padeçer y de hauer pauor y

tristeza, o temor, o pobreza de coraçon. onde Augustino. Queriendo morir nuestro maestro | Jesu | , le plugo tristar·se: por enseñar a sus martires y seruidores no deuer

por·ende atentissima y deuotamente son de notar los actos que el piadoso | Jhesu | hizo en·la oracion. El principal fue buscar oportunidad de tiempo para orar: